¡ Qué ruta más intensa !
En el coche de Javier con M. José y Luis. Desayunamos en Los Molares en una rotondita entrando..muy bien.
Para allá lo pasé mal por el mareo del curveo...pero aguanté hasta el final.
Luis padece Alzeimer en su primer estadio pero estuvo muy hablador sobre flamenco ( incluso se arrancó por una bambera iniciando yo el compás), he de reconocer que canta divino con una melodia vigorosa y clara a la vez. Le gusta Fosforito. No el "gitaneo"fácil. Es muy drástico y extremista exponiendo sus ideas. Me dice que desde que se fue su Antonia no habia cantado nada hasta hoy...Ya de vuelta lo llevamos a su casa y nos recibió su perra pastor aleman, qué linda y cariñosa con todos...
La ruta fue preciosa, llena de frescura y sombra y sonido de aguas por todas partes.
Los rododendros en su mejor momento !!!!!!Las orillas del canuto que seguimos repletas de morado intenso.
Nos hicimos la foto oficial en la iglesia derruida de la Sauceda,lugar mágico con una energia luminosa que yo percibo muy especial. Alli murieron muchos republicanos y gente que estaba fuera de la ley ( desahuciados de la sociedad) como contrabandistas, bandoleros, huidos...
Pegué un batacazo bajando por piedras sueltas. Me dejé caer, como una croqueta de polvo pero no me lastimé.
Después de un pesado tramo de cuesta y calor llegamos a la laguna de aguas quietas como un espejo y totalmente cubierta por enormes árboles. Un remanso de frescura y paz. Aquí comimos.
Antes de reanudar la marcha Susi y yo fuimos al pipi y ellos se fueron despacito. Intentando alcanzarlos equivocamos el sendero y de pronto nos encontramos en un mar de zarzas enmarañadas. Incapaces de deshacerlo, pues todo nos parecia igual, sacamos el silbato y sin parar de pitar exploramos en terreno arriba y abajo. No habia manera...qué agobio...Por fin se oyeron voces que venian a buscarnos..eran Alfonso, Lola H y Felix ( persona magnifica, compañero de universidad, estuvimos rememorando aquellos años).
Nuestro coordinador Rufino se acercó con su coche algo enfadado pero todo acabó bien.
Y al llegar a casa a votarrrrrr.
En el coche de Javier con M. José y Luis. Desayunamos en Los Molares en una rotondita entrando..muy bien.
Para allá lo pasé mal por el mareo del curveo...pero aguanté hasta el final.
Luis padece Alzeimer en su primer estadio pero estuvo muy hablador sobre flamenco ( incluso se arrancó por una bambera iniciando yo el compás), he de reconocer que canta divino con una melodia vigorosa y clara a la vez. Le gusta Fosforito. No el "gitaneo"fácil. Es muy drástico y extremista exponiendo sus ideas. Me dice que desde que se fue su Antonia no habia cantado nada hasta hoy...Ya de vuelta lo llevamos a su casa y nos recibió su perra pastor aleman, qué linda y cariñosa con todos...
La ruta fue preciosa, llena de frescura y sombra y sonido de aguas por todas partes.
Los rododendros en su mejor momento !!!!!!Las orillas del canuto que seguimos repletas de morado intenso.
Nos hicimos la foto oficial en la iglesia derruida de la Sauceda,lugar mágico con una energia luminosa que yo percibo muy especial. Alli murieron muchos republicanos y gente que estaba fuera de la ley ( desahuciados de la sociedad) como contrabandistas, bandoleros, huidos...
Pegué un batacazo bajando por piedras sueltas. Me dejé caer, como una croqueta de polvo pero no me lastimé.
Después de un pesado tramo de cuesta y calor llegamos a la laguna de aguas quietas como un espejo y totalmente cubierta por enormes árboles. Un remanso de frescura y paz. Aquí comimos.
Antes de reanudar la marcha Susi y yo fuimos al pipi y ellos se fueron despacito. Intentando alcanzarlos equivocamos el sendero y de pronto nos encontramos en un mar de zarzas enmarañadas. Incapaces de deshacerlo, pues todo nos parecia igual, sacamos el silbato y sin parar de pitar exploramos en terreno arriba y abajo. No habia manera...qué agobio...Por fin se oyeron voces que venian a buscarnos..eran Alfonso, Lola H y Felix ( persona magnifica, compañero de universidad, estuvimos rememorando aquellos años).
Nuestro coordinador Rufino se acercó con su coche algo enfadado pero todo acabó bien.
Y al llegar a casa a votarrrrrr.
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