Nunca nadie me regaló flores.
Nunca nadie me envolvió de besos.
Nunca nadie me puso descalza
sobre hierbas y flores de cielo.
Nunca nadie asaltó mi cama
ni desató con besos mis sueños...
Nunca nadie derramó sus lágrimas
en miradas calientes de espejo.
Nunca nadie...
Hasta tu encuentro.